Nuestra esforzada historia a través de los años.
La historia de nuestro establecimiento tiene su inicio con la llegada de doce religiosas enviadas el 8 de septiembre de 1874 desde Paderborn, Alemania, las cuales arribaron al puerto de Ancud el 3 de noviembre del mismo año. Cuatro hermanas partieron hacia Puerto Montt el 3 de enero de 1875 con la misión de evangelizar, ayudar a los colonos alemanes radicados en la zona, atender el hospital y cuidar de las niñas necesitadas.
Ellas fueron:
- Sor Inocencia Saenger, Superiora
- Sor Federica Fleitmann
- Sor Eidia Hufnegel
- Sor Honorata Hengstebeck
Comenzaron con su labor en el hospital, al cual se le llamó Hospital Santa María. De forma aledaña se implementó una escuela, la cual brotaría hasta convertirse hoy en día en lo que es nuestra institución. El Colegio comenzó a ampliarse a medida que lo hacía Puerto Montt, teniendo una edificación en calle Rengifo.
De allí emergieron muchas alumnas egresadas que realizaron funciones como profesionales, funcionarias públicas y educadoras comprometidas con la formación de hogares cristianos, entregando a la sociedad hijos católico-cristianos y progresistas. Cuando dicha infraestructura ya no se consideró adecuada para el establecimiento, se comenzó a planificar una nueva construcción en el alto de la Casa San José.
La primera piedra fue puesta el 23 de diciembre de 1958, bajo el alero de la Madre Superiora provincial Pilar Sánchez y de Monseñor Alberto Rencoret, quedando la obra a cargo del arquitecto Miguel Ángel Belloni. El 20 de agosto de 1959 arribó desde Santiago la imagen de María Inmaculada, la cual a cuyo amparo quedó encomendada la obra.
Con el terremoto de mayo de 1960, el Colegio sufrió graves consecuencias al igual que gran parte de la ciudad de Puerto Montt. Las instalaciones de calle Rengifo ya no se consideraron adecuadas por lo que se adaptaron las nuevas edificaciones para recibir al alumnado, concretándose el traslado el 13 de marzo de 1961 con un total de 610 alumnas. Luego de operar por más de 30 años, el internado cerró en 1996.
El 7 de septiembre de 1984 y bajo la guía de Sor Ana Rosende, entonces directora del Colegio Sor Lucía Olivares y con la asistencia de Monseñor Eladio Vicuña Aránguiz, se puso la primera piedra para la construcción de nuevas instalaciones de nuestra institución bajo lo que es a día de hoy el Altar Mayor. Así, el Colegio fue creciendo al adecuarse a las nuevas necesidades educacionales.
Entre los años 1979 y 1980 se construyó el Gimnasio gracias al esfuerzo conjunto de la Congregación y al generoso aporte de Padres y Apoderados. En 1994 se construyó la entrada y frontis principal con oficinas y aulas anexas.
Al día de hoy, nuestros alumnos cuentan con salas de clases, laboratorios y espacios físicos completamente equipados para lograr tener una educación integral en cada uno de sus niveles educativos.